martes, 14 de abril de 2009

Y no era para tanto

No. No fue para tanto. Aunque en mi casa siempre han dicho que tengo una pachorra alarmante, me ponen nerviosa las situaciones que no controlo. Meto la pata mil veces al día por confiada, por no pensar siete veces las cosas antes de soltarlas por mi bocaza, por puñetera.



Sin embargo, hay conversaciones que ensayas veintisiete veces antes de afrontarlas. Son esas conversaciones que piensas y repiensas, que te corroen un poco por dentro. Las importantes, las trascendentes, las decisivas.



Me pasaba igual en la facultad con cada final (sí, también con los parciales...). Cuando me ponía nerviosa, Jose me decía que tampoco era tan trascendetal una puñetera prueba académica. "Si fuerta tan trascendente no tendríamos cuarenta exámenes, tendríamos solo uno". En fin.


Lo mejor de hacer un examen es que te lo quitas de encima. Yo hice el mío el lunes. Y no fue para tanto.


He suspendido pero... ya habrá otros. He suspendido y... puff. Me jode porque en el fondo sabía que iba a suspender, me molesta por las horas invertidas, me escuece porque, en el oral, tenía las cosas mucho mejor preparadas y no fui capaz de contarlas bien.


En realidad, tampoco importa tanto. Había repetido mil veces la respuesta adecuada a cada pregunta y como redirigirlo todo para salir ganando y no hubo manera. Antes del examen, pensé que el suspenso me dejaría un par de meses tocada de moral y...


Lo celebré con amigas y algunos abrazos. Una cerveza con la Mendo para brindar por el suspenso. Otra con Maripi, otras muchas con mi Nico que ha estado de visita y con mi guachuza, otra por la Cobo y su cumpleaños (FELICIDADES) y con el canijo, otra por mi....


Quizá el suspenso no fuera para tanto pero la resaca... mae mía.


De todo, me quedo con dos conversaciones:


1.- La filosófica


-"Estás más triste que antes"

-¡Qué dices! Estoy genial. Soy feliz, no permanentemente pero...

-Para mí eres como te veo y te veo más triste.



2.- La macarra (todo en broma y metafórico, como aclaración)


-Sabes lo que vale una bala, ¿no?, 1,80 céntimos

-Sí, ya me contaste.

-Pongo 3,60 y gasto dos.

-Vas a fallar con la primera???

-No. La primera va a ser para que le duela, para que lo sienta... luego la otra



PD: La foto no tiene na que ver con todo esto pero la recordé esta semana santa y me da buen rollo,


Bsos rubias californianas. En cuanto me recupere de los sustos, robos, broncas y cosas varias, vuelvo, juas juas.

3 comentarios:

Jose Manuel Noguera dijo...

Oye guachuza a mí no me atribuyas frases tan trascendentes, además esa no la recuerdo ;)

Bueno, no tengo ni idea de en qué exámenes andas metida, pero ni sueñes que voy a desearte ánimos, porque no los necesitas ;P

Y sí, nos veremos en Graná...

María Ruiz dijo...

La soltaste en el claustro en un día de nervios por un examen que ya ni recuerdo pero que sí aprobamos. fue en mitad de una charla con las niñas repasando cinco minutos antes como si nos fuera la vida en ello. ¿te va sonando?

Ya hice el examen y no pienso repetirlo en muuuucho tiempo. da igual, lo he superado. Ya sabes, cuando vengas te lo cuento. mil bsos

Jose Manuel Noguera dijo...

ok, si tú lo dices, tu memoria siempre fue mejor que la mía ;)