
miércoles, 30 de abril de 2008
Los colores de la gente

sábado, 19 de abril de 2008
mirando al mar

Lo dice cada vez que intenta volar y se queda sin alas, cada vez que sueña con llegar a la playa, respirar con tranquilidad y sentirse congestionantemente feliz. Tiene una porción de mar atrapado en sus ojos y tiene que conformarse con eso, con ese trocito de azul.
Se levanta cada mañana convencido de que hoy puede ser ese día en el que, sin saber muy bien por qué, tenga el valor de atar en corto su vida y empezar a tomar decisiones. A empezar, por lo menos. Se levanta cada mañana convencido de que hoy puede ser ese día en el que mande a la mierda a su jefe, agarre la maleta roja que le guiña desde el fondo del armario, se despida de las rejas y haga sus sueños realidad.
Pero nunca es ese día. Suena el teléfono y lo deja para luego. Se sube en el coche, mira el cruce de señales y siempre, siempre, cada día, aparca sus sueños y su cutre polo azul junto a la cafetería. Se sienta para volver a hacer un balance, repasar y reposar los motivos, las obligaciones, los sueños, las deudas, las promesas, los deseos, los instintos, la familia...
Y se toma el café amargo, ultimamente más amargo, sin saber cómo mirar al mar.
Es un buen tío, un chaval simpático con pinta de feliz y una tierna sonrisa que parece tenerlo todo. Es eso, y muchas otras cosas. Sólo cuando uno se acerca mucho a la porción de mar atrapada en sus ojos se da cuenta de la cárcel que le apresa.
"Los barrotes pueden ser de oro y sigue siendo una cárcel. Y puede ser peor, porque hay barrotes que no ves y, precisamente por eso, no sabes cómo acabar con ellos".
Y mañana, cuando amanezca, volverá a subirse en su polo con la ruta de un mapa apuntando una playa, otra vida, un destino diferente, y volverá a aparcarlo junto a la cafetería del café amargo y largo, cada vez más amargo y más largo. Y siempre, con la misma canción de Sabina sonando de fondo, hablándole del mar, de Portugal, de la gente que se ahoga, de los que te decomisan el sudor y las sonrisas.
'Sin alas para volar,
prófugos del instituto y de la cama .
Pájaros de Portugal,
apenas dos minutos, mala fama.
Luego, la Guardia Civil, les decomisó
el sudor y la sonrisa ...
Las postales de Estoril, sin posada,
sin escudos y sin Visa...
Se llamaban Abelardo y Eloísa
Bucearon contra el Everest y se ahogaron.
Nadie les enseñó a merecer el amparo
de la virgen de la soledad
¡qué pequeña es la luz de los faros! '
martes, 8 de abril de 2008
Me quedo perpleja
Y me he quedado perpleja con una conexión en directo, en una gasolinera de las que sirve biodiesel. Su propietario ha definido así el perfil de los usuarios, literal:
"Vienen muchos gitanos que quieren echar biodiesel y gente normal"
¿¿¿¿¿¿¿?????????
A este 'empresario' sí que le hace falta un reciclaje, porque se presenta muy, muy verde, en cuanto a cuestiones como la integración social, la igualdad...
lunes, 7 de abril de 2008
De esos días tontos

Puede venir una persona. Y entonces, respiras profundamente y dejas que las aguas vuelvan a su cauce. Luego llega un segundo intento de tocar la moral y piensas: '¿Para qué vas a mosquearte, María, si esta guerra no va contigo?'. Pero como el que la sigue la consigue, lo dejo claro: Tengo un día tonto, estoy hasta las mismísimas narices. Me jodieron el lunes, y aún queda mucha jornada por delante.
Me han jodido el día los que no se quieren, los que se quieren demasiado, los que no saben querer a nadie, los que no entienden que puedas querer a otro, los que no comparten que se pueda querer a más de uno y los que, directamente, no te dejan quererte, quererles ni querer a nadie... Y aunque parezca un anuncio de Coca-Cola o el día de San Valentín, todo este 'querer' que me ha jodido el día responde a cuestiones laborales.
Termino con los tres refranes que me ha dejado el día, queriendo o por casualidad:
Al que cuece y amasa, de to' le pasa
Donde antes hubo polvo, ahora hay fango
Es que no se puede querer tetas y sopas
Y el que me falta: 'Esto también pasará'
Lo bueno de estos días es que, por malos que sean, duran como mucho 24 horas.
sábado, 5 de abril de 2008
Frases de sabios en fin de semana
-No, gracias. Estamos paseando.
(Gran frase de J. Carlos, a eso de las dos de la mañana, por calle Elvira, buscando un bar con los amigos)
miércoles, 2 de abril de 2008
Humor en el trabajo
